Un hijo no puede irse.
No puede abandonar a su madre.
Y tú, como buen hijo,
la acompañaste en su final.
Allí estabas.
Tan sonriente como siempre,
estoy segura de ello.
Allí estabas.
Cuidando de que todos mis recuerdos,
se quedasen bien guardados.
Sin poder olvidarte jamás.
Como buen hijo,
ahí sigues, junto a tu madre,
tu madre, buena, santa.
Y rodeado de aquella tierra,
que tantas veces hemos pisado
Tierra que ahora está impregnada de vosotros,
que cada vez que piso me recuerda que ya no estáis.
Un hijo, que no ha abandonado a su madre.
pero sí a los demás.
Y tu hijo, como buen hijo,
siempre te recordará,
porque todos le hablamos,
de su buen papá.
7 de marzo de 2010
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3 comentarios:
Un buen hijjo, seguro, en la ausencia o en la cercanía. hermoso. besos
Simplemente... Era genial.
Gracias por tu comentario, un beso!
Bonito y emotivo, me gusta, transmite sentimiento y eso no se logra siempre en un texto =)
PD:Me acabo d dar cuenta dk me contestas a los coments aki, y yo asi nunca los veo! x-D
Contestame si no te importa en mi blog, y así not da la falsa sensación dk t ignoro x-D
Saludos guapa!
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